El cuadro donostiarra estaba eliminado en el minuto 90, pero un gol de Willian José en el 91 y otro del Rijeka en el descuento frente al AZ, dan la clasificación a la siguiente fase

La Real Sociedad salió a ganar desde el minuto uno en el estadio Diego Armando Maradona, frente a un Nápoles que al igual que los donostiarras también se jugaba la clasificación a la siguiente ronda. Los hombres de Imanol Alguacil sin Silva ni Oyarzabal, dos piezas claves en el equipo, demostraron que querían la victoria para asegurar su pase a los dieciseisavos de final. La Real presionó muy cerca del área del Nápoles para dificultar la salida de balón y tratar de llegar a la portería defendida por Ospina. Fruto de esta presión nació la primera ocasión en las botas de Merino, cuyo disparo atrapaba el guardameta colombiano. Seguía dominando la Real con largas posesiones y llegaba con peligro gracias a las internadas de Januzaj y Portu.
El belga se adueñó de su banda derecha poniendo en apuros a la defensa del Nápoles y en una jugada sin aparente peligro centró desde el lateral de área y el balón le cayó a Portu, que cedió al brasileño Willian José que disparó a puerta pero el portero desbarató el tiro. La ocasión más clara del partido llegó por la banda derecha de Januzaj que cabalgó por su banda y cedió el balón a Portu, que a puerta vacía mandó el balón fuera de la portería. La Real planteó un partido muy serio con Mikel Merino como hombre estrella, gracias a su aporte en defensa y ataque. El trivote ‘txuri urdin’ mostró su mejor versión adueñándose del partido. El Nápoles trató de aprovechar los espacios en defensa con salidas al contragolpe, pero los zagueros se mostraron muy sólidos.

Los italianos comenzaron a mantener más el balón y a acercarse a la portería de Remiro. Insigne probó fortuna desde la frontal del área, pero su disparo se marchó alto. Bakayoko estuvo a punto de adelantar al equipo de Gattuso en un saque de esquina, ya que el balón se quedó sin dueño dentro del área pequeña y el centrocampista aprovechó para meter el pie y su remate rozó el poste derecho. El Nápoles comenzó a adueñarse del encuentro, motivo por el cual Alguacil pedía a los suyos que mantuvieran el balón. Mikel Merino seguía haciendo la labor de ‘pulpo’ robando balones y en una recuperación cerca de la portería probó suerte y su intención fue repelida por el guardameta. Zielinski avisó a Remiro con un disparo que hizo que el portero se empleara a fondo para despejar el balón a saque de esquina. En la jugada siguiente, tras un despeje de la defensa donostiarra, el balón cayó de nuevo en las botas del polaco, que desde la frontal golpeó el balón y lo introdujo en la portería de la Real poniendo el 1-0 en marcador en el minuto 36 de la primera parte. El gol dejaba eliminados a los de Alguacil, que siguieron intentando ir a por el partido, pero el colegiado señaló el final de la primera parte.

El inicio de la segunda parte fue idéntico al de la primera parte con una Real volcada hacia la portería napolitana. Las bandas tuvieron protagonismo ya que todo el peligro llegaba en las botas de Januzaj y Portu. La Real seguía gozando de ocasiones con un gran juego de posesión pero el acierto, fundamental en el fútbol, no estaba de su lado. Merino y después Januzaj no llegaron por centímetros a dos centros de Monreal, que actuaba más de extremo que de lateral. El Nápoles esperaba encerrado en su campo para aprovechar la velocidad de sus dos extremos Insigne y Lozano, que buscaban la diagonal para crear espacios y lograr ocasiones de rematar a puerta. Seguían llegando las oportunidades y los donostiarras perdonaban más y más.
La Real insistió en los minutos finales pero se vio a un equipo muy desgastado por el enorme esfuerzo físico realizado durante todo el encuentro. El equipo de Alguacil no merecía perder ese partido; al contrario, merecía ganarlo y de goleada. Creyeron hasta el último minuto cuando Ahien colgó un balón al área que se quedo muerto en el punto de penalti y que Willian José reventó las redes de la portería de Ospina poniendo el 1-1 en el minuto 91.
El Rijeka venció en su partido contra el AZ por lo que aseguró la clasificación ‘txuri urdin’ a dieciseisavos de final de la Europa League y estará en el sorteo el próximo lunes.
Nápoles (4-3-3): Ospina; Di Lorenzo, Maksimovic, Koulibaly, Rui (Ghoulam 82’); Zielinski (Elmas 73’), Fabián Ruiz, Bakayoko (Demme 68’); Lozano (Politano 68’), Mertens (Petagna 68’), Insigne.
Real Sociedad (4-2-3-1): Remiro; Zaldúa (Gorosabel 46’), Zubeldia, Le Normand (Sagnan 77’), Monreal (Ahien 77’); Guevara (Isak 77’), Zubimendi; Merino, Janujaz, Portu (Barrenetxea 55’); Willian José.
Árbitro: Oren Grinfeld. Amarillas a Mertens 24’, Zubimendi 38’, Lozano 40’, Fabián Ruiz 58’, Le Normand 67’, Zubeldia 81’
Goles: 1-0 Zielinski 36’, 1-1 Wilian José 91’
Estadio: Diego Armando Maradona (Nápoles, Italia)