El Real Madrid venció al FC Barcelona en el Camp Nou y se lleva el primer Clásico de la temporada. El partido de la jornada no defraudó en cuanto a goles y fue el equipo blanco quien resucitó tras una semana para el olvido tras las derrotas ante el Cádiz y el Shakhtar Donetsk. La victoria hace respirar al entrenador del conjunto madridista Zinedine Zidane tras las dudas sobre su continuidad en los últimos días, por el contrario el Barcelona del holandés Ronald Koeman no termina de carburar con la segunda derrota consecutiva tras la obtenida el pasado sábado en Getafe.
El partido comenzaba con una buena combinación de pases del Real Madrid llegando a conectar 24 pases consecutivos hasta que Benzema puso el balón al hueco para que el uruguayo Fede Valverde se plantase frente al Neto y fusilase, haciendo de esta forma el primer gol del partido en el minuto 5. No le dio tiempo al equipo blanco a celebrarlo cuando tres minutos más tarde, Ansu Fati ponía el empate en el marcador tras un buen pase de Jordi Alba. Corría el minuto 8 y ya había dos goles, el partido prometía buen juego, mucha igualdad y sobre todo goles.
Contra todo pronóstico el balón no lo dominaba el FC Barcelona, en la primera parte fue el equipo blanco quien más tiempo estuvo con el balón en sus botas, pero ambos equipos generaban claras ocasiones de peligro con cierta facilidad. Tras un córner que blocaba fácil Neto al remate de Sergio Ramos, el Barcelona montaba la contra y Courtois salvaba al Real Madrid con un paradón espectacular al remate de Messi, la tarde iba de sustos ya que en la siguiente jugada era Neto quien despejaba el remate de Benzema. El Barcelona durante la primera mitad quería implantar su juego ante un Madrid que defendía bien atrás con las líneas muy juntas, pero el equipo blanco no renunciaba en ningún momento al salir al ataque y mantener el balón cuando era necesario. Así concluyó la primera parte, tanto el marcador como el juego reflejaba igualdad absoluta.
Tras la reanudación del partido, el FC Barcelona empezó mucho mejor que el Real Madrid que veía atónito como el equipo blaugrana llegaba con cierta facilidad a su área y no conseguían mantener el balón como en la primera parte. Zidane optó por aumentar la presión en la salida del balón desde atrás del equipo dirigido por Koeman. El Barcelona era superior y prueba de ello fue una clara ocasión que erró Coutinho al cabecear fuera un centro del joven Ansu Fati, el Barcelona poco a poco se hacía dueño del partido, pero ninguno quería arriesgar más de lo debido. En una falta lateral que no consiguió cabecear Sergio Ramos, el VAR entró a revisar la jugada tras las protestas del capitán tras un supuesto agarrón de Lenglet.
Martínez Munuera el árbitro del partido pedía tranquilidad a unos y a otros cuando desde la sala VOR, Sánchez Martínez le pedía ir al monitor a ver la acción. Tras ver las imágenes lo tuvo claro y pitó penalti a favor del Real Madrid ante la indignación de jugadores, cuerpo técnico e incluso directivos del Barcelona. Ramos anotaba el penalti y a partir de ese momento el Madrid se sintió más cómodo, con tranquilidad en su juego, sin correr riesgos y defendiendo muy bien atrás las ocasiones que intentaba generar el equipo blaugrana.
Así fue hasta el final, Koeman hizo cuatro cambios muy ofensivos que en ningún momento supusieron un susto para el rival y el Madrid mientras tanto, pillaba alguna contra que generaba mucho peligro, donde Neto salvó el 1-3 en dos ocasiones, primero con Kroos y después con Sergio Ramos, pero no pudo con Modric, el croata que había entrado en la segunda parte por un cansado Valverde, puso pausa en el juego del Real Madrid y tras un pase de Rodrygo marcaba el 1-3 que sentenciaba el partido a falta de pocos minutos.
Zidane respira tranquilo tras las especulaciones sobre su futuro en el banquillo blanco y ganó el primer Clásico que dirigía el holandés Ronald Koeman y el equipo blanco se pone líder provisional del campeonato liguero.