
Sevilla y Barcelona han empatado a uno en un extraordinario partido disputado en el Camp Nou. Los hispalenses hicieron más por llevarse el botín de los tres puntos frente a un Barça gris y fallón.
El partido perteneciente a la jornada 5 de la Liga Santander nos hacía presagiar un gran encuentro por la envergadura de los dos equipos. Un Barcelona que parecía otro tras las dos victorias contundentes frente a Villarreal y Celta de Vigo, contra un Sevilla que, tras el gran esfuerzo de la Supercopa de Europa, supo ganar sus dos primeros partidos de liga.
El Sevilla comienza apretando
El equipo de Lopetegui, hoy en la grada, salió muy bien al partido con una presión que no dejaba a los culés sacar el balón. Tal fue el gran arranque del equipo hispalense, que Luuk De Jong en el minuto 10 adelantó al equipo visitante tras aprovechar un rechace.

Apenas hubo tiempo para celebrar el primer gol del partido cuando Coutinho, tras un error de Jesús Navas, consiguió devolver el empate al marcador. A pesar de empatar, el Barcelona no estaba cómodo por la gran intensidad empleada por el cuadro sevillista.
El Sevilla dominaba y el Barcelona seguía con problemas a la hora de sacar el balón jugado. Fernando Reges, el mediocentro defensivo del Sevilla, hizo un partido extraordinario tanto a la hora de ir a robar a campo rival como en acciones de corte defensivo.
Segunda parte tranquila
Con ese empate a uno se llegó al descanso y tras la reanudación el partido no cambió en exceso. El Sevilla seguía muy disciplinado y con un rigor táctico habitual de este equipo. Lo que se conoce en el argot futbolístico como equipo de autor. Un centro rebotado en Piqué se estampó en el palo e hizo temblar los cimientos del Camp Nou.

El Barcelona necesitaba cambios y Koeman agitó la coctelera, entraron Pedri y Trincao. Los jugadores de la zona ofensiva culé no estaban teniendo su mejor noche. Incluso el astro, Leo Messi, estuvo muy gris y Antoine Griezman siguió completamente desaparecido, como casi siempre desde que llegó al Barcelona.
También Lopetegui hizo cambios. Salieron Suso y Ocampos para dar paso a Munir y El-Nesyri pero en los últimos compases del partido las ocasiones escaseaban. El cansancio de la jornada intersemanal hacía mella en los dos conjuntos, exceptuando algún disparo de Messi y Trincao que detuvo sin demasiados apuros Bono.
Al final, reparto de puntos que deja una sensación agridulce en los sevillistas, que tuvieron opciones de ganar en el Camp Nou 17 años después. El Barcelona también tendrá que mejorar si se quiere aspirar a conseguir grandes cosas en esta temporada al cuadro barcelonista.
El Barcelona se va al parón con 7 puntos en tres jornadas, pero con mucho trabajo por delante. Más de lo mismo para el Sevilla que mantiene la dinámica positiva que le llevó a la final de la Europa League la temporada pasada.
Autor: Alejandro López Fernández