Valladolid y Getafe se repartieron los puntos en esta tarde de martes en el José Zorrilla. Los goles llegaron ambos en la primera mitad, con Jaime Mata en primera instancia y Enes Ünal después, como protagonistas en las áreas.
Partido con mucho ritmo, o al menos comparando con lo que llevamos de liga en esta reanudación. Pero eso sí, con muchas interrupciones también. Cada balón aéreo, cada disputa acababa con algún jugador en el suelo y con Soto Grado (colegiado del partido) llevándose el silbato a la boca.
La primera noticia significativa en el partido iba a llegar a raíz de estos nuevos “tiempos muertos” que se utilizan para hidratarse sí, pero también para tratar de cambiar lo que no le gusta a cada uno de los técnicos. Y efectivamente, Bordalás parecía dar con la tecla tras la pausa. El Getafe salió mordiendo en los últimos quince minutos del primer periodo, y fruto de ello acabó llegando el primero de la tarde. De nuevo una jugada de esas, llena de rebotes y cabezazos, donde Jaime Mata se apuntaba el premio al más listo de la clase y “fusilaba” a Masip con un tiro raso al primer palo.
El Getafe lo seguía intentando antes del intermedio, pero, al igual que el día del Eibar, un despiste en una nueva segunda jugada iba a crucificar a los de Bordalás. Con el tiempo rebasando por más de un minuto de lo que había anunciado el cuarto árbitro, Enes Ünal recibía un codazo de Djené, que al igual que el de Bartra en el Pizjuán, iba a castigarse con la pena máxima. El propio delantero turco no desaprovechaba el regalo y ponía el empate justo antes del descanso.
En la segunda mitad pudimos ver algo más de juego combinativo, con ocasiones por ambos lados y un Getafe que cambió de forma radical, pero de nuevo cuando ya era tarde. Con los cambios Bordalás fue capaz de revolucionar el partido, Jorge Molina, Ángel y sobre todo Jason lo intentarin una y otra vez en los minutos finales del partido, pero la falta de puntería hizo que ningún jugador azulón fuese capaz de deshacer el empate.
El Valladolid, que se encontraba cómodo con el resultado, aguantó sin problemas el último “arreón” del Getafe y se llevó un punto que le sirve para alejarse aún más de la zona caliente de la tabla. Ocho puntos a falta de siete partidos parecen suficientes para vivir un final de temporada tranquilo. Por su parte, el Getafe se aleja también de los puestos de Champions, y aunque Jaime Mata aseguró que “lo intentaremos hasta el final”, la realidad es que cada vez parece más complicado que el himno de la Champions se escuche por el sur de Madrid la temporada que viene.
Autor: Álvaro Ramos Pulido
